Una suave mezcla entre el cielo y el océano, la piedra turquesa ha despertado muchos mitos y leyendas durante milenios. Muy popular entre los joyeros, la turquesa es una fina piedra protectora. Descubre su historia y todos sus beneficios a lo largo de este artículo.
Historia de la Turquesa
La turquesa, que es de color azul y que una vez calentada puede volverse verde, fue muy popular en las civilizaciones más antiguas: fue explotada por los maestros de Egipto, por los aztecas y en otras culturas precolombinas. La turquesa fue utilizada por los persas, habitantes de Persia ahora llamada Irán, durante más de dos mil años. La turquesa se llamó «Pirouzeh», que significa «victoria», luego «Firouzeh» después de la ocupación árabe. En el Imperio Persa se creía que la turquesa puesta alrededor del cuello o como pulsera tenía el poder de proteger contra la muerte natural. Se suponía que el cambio de tonalidad puede atestiguar un mal presagio que podría ocurrir en un futuro cercano. Asimismo, encontramos en las mansiones iraníes cúpulas decoradas con turquesas que hacen referencia al simbolismo del cielo y la tierra. En Egipto, desde las primeras dinastías de los faraones, los egipcios habían explorado los minerales de la Península del Sinaí. Esta turquesa se distinguió por tonos verdes. Se nota en varios objetos, especialmente los pertenecientes a la nobleza. Es el caso de la famosa máscara de Tutankamón que estaba completamente adornada con esta piedra. La turquesa estaba vinculada a Hathor, la deidad del amor, la belleza, la música. La piedra turquesa había regresado a Europa a través de Turquía. Era de gran importancia para los jinetes turcos que creían que preservaba su montura de las caídas. En Europa, allá por el 1800, el turquesa volvió a estar en primer plano poniéndose de moda y cada vez más presente en diferentes ámbitos de la sociedad. Es en cierto modo una forma de reacción a las expediciones de excavaciones arqueológicas en Egipto y especialmente después del descubrimiento de la tumba de Tutankamón. Surgió un nuevo diseño de renacimiento egipcio en la arquitectura, y la turquesa se destacó en la joyería y otros objetos de arte. Actualmente, la piedra turquesa se utiliza en joyería para la elaboración de multitud de joyas, adornos, pulseras, anillos o colgantes. Es muy apreciado por los joyeros. Los principales minerales se encuentran en Tanzania, Estados Unidos, Irán, Israel, Turquía, México y China.
Caracteristicas de la Piedra Turquesa
El nombre de la piedra se remonta al siglo XVI y resulta de la expresión francesa “piedra turca” o “piedra de Turquía”, pues fue durante las campañas militares cuando fue descubierta y cada vez más apreciada en Europa. El azul turquesa, generalmente semiopaco, forma parte de la familia de los fosfatos de alúmina. Es la mezcla de fosfato impregnado de cobre y aluminio lo que le da este tinte azul. Sin embargo, el tinte verde que a veces muestra resulta de impurezas de hierro que reemplazan al aluminio. Esta piedra generalmente se forma bien en regiones áridas e infértiles. Para la anécdota, estamos hablando de bodas turquesas para celebrar 18 años de matrimonio.
Propiedades de la Piedra Turquesa
A NIVEL FISICO
La turquesa es capaz de fortalecer y revitalizar el sistema inmunológico. Cura enfermedades infecciosas del ojo. También es muy eficaz para combatir los efectos de intoxicac犀利士 iones y dolores de cabeza. Depura y controla los líquidos y mucosas del organismo, pudiendo reducir el exceso de colesterol. Facilita la digestión, activa la circulación sanguínea y elimina toxinas. Es eficaz para tratar enfermedades oculares, destapar la congestión nasal y depurar los pulmones. Calma la migraña, combate el nerviosismo y favorece la deglución. Puede actuar favorablemente sobre los riñones y la vejiga, luchar contra los trastornos físicos, la anorexia o la bulimia. Es capaz de higienizar zonas del cuerpo atacadas por virus y bacterias. La turquesa protegería contra las malas caídas y protegería a los marineros de los naufragios. Como elixir, la turquesa ayuda a reponer y revitalizar los tejidos. Se puede utilizar en caso de desgarros musculares, ya que permite irrigar los tejidos musculares. Alivia el dolor muscular debido a una oxigenación insuficiente o un esfuerzo físico sobrehumano que produce estrés.
A NIVEL EMOCIONAL/ESPIRITUAL
La turquesa es efectiva para absorber energías negativas, como pensamientos dañinos. Tiende a protegerte siendo un baluarte infranqueable contra las desgracias, las maldiciones que podrían haberte alcanzado y destruido. Puedes llevarlo contigo o ponerlo en el coche como un fetiche de protección contra accidentes. La turquesa promueve la positividad y actúa sobre los temperamentos para hacerlos más serenos, más flemáticos, más tranquilos. Desarrolla el sentimiento de amistad, fortalece las relaciones sociales, el intercambio, la creatividad. Es la piedra ideal en caso de crisis nerviosa o ataque de ansiedad. La piedra puede actuar como antidepresivo y trae felicidad total. También puede ser un elixir de sabiduría, que favorece la reconciliación en caso de altercado, discusión o malentendido. Pero preste atención a la condición de su piedra. Si ves que durante su uso pierde brillo, se vuelve opaco, significa que ha agotado todo su vigor y por lo tanto debe ser devuelto rápidamente a la tierra.
Precio de la Piedra Turquesa
Los cristales de esta pureza son únicos y extremadamente raros. Por cada 45 kg de mineral extraído, solo alrededor de 11 kg (alrededor del 25 por ciento) se consideran piedras de joyería de calidad y de estos, solo alrededor de 0,4 kg se consideran de alta calidad o calidad de gema. No es raro que este grado de piedra preciosa turquesa tenga precios de venta al público entre 300 y 400 € por quilate. Con un simple cálculo de conversión entre quilates y gramos resulta que esta piedra preciosa vale más de tres veces el precio del oro.
